Argentina anunció oficialmente la entrada al default a través de un escueto comunicado del ministerio de Economía en dónde afirma que deberá incumplir el pago de los bonos Discount estipulado para el 30 de junio ya que este podría ser embargado por los holdsout. Mientras tanto el dólar libre continúa subiendo, las acciones de las empresas argentinas se desploman en la bolsa y el riesgo país sube 34 unidades a 832 puntos básicos. El precio de la impericia K lo pagamos todos, que no quepan dudas.
Tal como Seprin predijo, las cláusulas pari passu le impiden a argentina cumplir con los vencimientos pactados para el 30 de junio a menos que le pague al mismo tiempo a los holdouts. La situación llegó a tan terrible desenlace por levantamiento del “stay” que impedía embargar activos del Gobierno, por lo tanto es imposible realizar el pago en el Bank o New York, tal como está estipulado.
Por supuesto, el gobierno nacional no dudo en lavar culpas y depositarlas en manos de la justicia estadounidense “El levantamiento del “stay” por parte del Segundo Circuito imposibilita así el pago en Nueva York del próximo vencimiento de la deuda reestructurada y muestra la inexistencia de voluntad de negociación en condiciones distintas a las obtenidas en la sentencia dictada por el Juez Griesa.” afirma el comunicado.
Por otro lado, muchos se preguntan si fue una estrategia hábil que la presidenta saliera vociferando y desafiando por cadena nacional, un día antes de mandar a sus abogados para que pidan al Juez Griesa un guiño de buena voluntad y permita que Argentina pueda cumplir sus compromisos con los bonistas reestructurados. Argentina necesitaba el apoyo del magistrado newyorkino al que los dichos de la presidenta no le cayeron nada bien (cabe recordar que CFK lo llamó “extorsionador”) pero, según trascendió, Cristina está demasiado ofendida como para intentar negociar, por lo que habría ordenado la redacción del comunicado emitido por la cartera de Economía.
En cuanto a las repercursiones del anuncio de Economía, las caídas registradas en Wal Street son las siguientes, según Infobae “las ADR de YPF operan con caída de 3,96%, a 31,03 dólares, Pampa Energía cede 2,62%, Edenor 3,18% y Petrobras Argentina 3,02%. También el panel de los bancos se mueve con clara tendencia negativa: 2,59% Grupo Financiero Galicia, 0,85% Macro y 0,49% BBVA Francés. Las excepciones son los papeles de Tenaris y Ternium que anotan subas iniciales de 0,28 y 1,11 por ciento respectivamente”.
Por su parte según Infobae “los mercados abrieron con alzas en las cotizaciones de los bonos globales, Boden, Discount y Par bajo legislación argentina, en un rango de 2,1% a 3,6% en los primeros que tienen vencimiento entre 2015 y 2017, y de apenas 0,9% a los que maduran después de 2033″.
Y agregan que “pierden valor los Discount y Par con legislación Nueva York: 0,3% y 2,72%, respectivamente, los cuales parecen haber sido claves para que el Índice de Riesgo País vuelva a moverse con significativo salto de 34 unidades a 832 puntos básicos, reflejando claramente la alta probabilidad de incumplimiento de pago de la deuda soberana”.
Comunicado del Ministerio de Economía
comunicado
En definitiva, la situación es extremadamente complicada. En este punto, pareciera que el gobierno está confundiendo las discusiones, porque enfrenta a los fondos buitres, Cristina habla de deuda soberana y se niega a negociar, pero por otro lado viene haciendo un enorme esfuerzo para retornar a los mercados internacionales.
En principio, habría que definir que un fondo buitre es un capital de riesgo que compra bonos de deuda pública de países cuyas economías son débiles, en el caso de Argentina durante la crisis del 2001 los bonos se adquirieron por sólo el 20 % de su valor nominal. Es un mecanismo financiero que existe y se practica regularmente.
El gobierno de Néstor Kirchner reconoció los derechos de estos capitales en el momento en que decidió reestructurar la deuda completa, incluida la contraída durante el 79-82 de la que tanto se queja Cristina y la que era reclamada por los capitales de riesgo. Esto no es un tema menor, porque a partir de ese momento en el que se reconoce completa validez a la deuda se habilita cualquier reclamo por parte de los bonistas (porque entre los que entraron al canje también se incluyen capitales de riesgo), tal como sucedió con NML, Aurelius, Blue Angel y otros pequeños inversores.
A partir de ese punto el gobierno cerró la puerta que le permitía cuestionar la validez de los reclamos de los holdouts y en cuanto a la legitimidad de la injerencia de la justicia de New York, se trata de la jurisprudencia habilitada por un contrato que el gobierno argentino firmó con los bonistas reestructurados.
Lo que corresponde en este momento es comportarse como un país serio y sentarse a negociar, instancia desestimada en primera instancia por Argentina ya que contaba con que iba a obtener el tiempo necesario para pagar sus compromisos, pero no fue así. Ahora no queda otra opción que salir por medio de la negociación, pero el mismo gobierno se colocó en un terreno hostil y complicado a dónde, lamentablemente, nos están arrastrando a todos los argentinos.